Fotos de Schaffhausen

Aqui estuvimos el 21 de Junio 2012

Pocos se imaginan que exista un lugar tan espectacular en pleno corazón de Europa: las Cataratas de Schaffhausen, en la frontera germano-suiza.
Una visita llena de naturaleza, cultura y un poco de aventura.

Una isla en pleno Rin se convierte en perfecto mirador.
Aunque su nombre recuerda a un establo de ovejas, la región está dominada por el ambiente fluvial y hasta silvestre que despliega el Rin en esta región. Las Cataratas de Schaffhausen son una especie de Niágara europeas. A las incesantes y torrenciales cascadas se tiene acceso tanto desde Alemania, como desde Suiza. Justo es mencionar que el acercamiento por tierra puede ser más pintoresco desde la parte suiza, porque la cercanía a los rápidos es mayor.
Un tranvía permite un acceso a las célebres cascadas del Rin, la más importante atracción turística de la región germano-helvética y una de las maravillas naturales menos conocidas.
Las Cataratas de Schaffhausen, un lugar mágico.
Un paseo en barco, ya sea desde la orilla alemana o desde la suiza, es toda una aventura, aunque pueda convertirse en una muy húmeda. De todos modos es recomendable acercarse en barco hasta la pequeña isla de rocas que corona justamente las Cataratas de Schaffhausen. Allí es posible desembarcar y escalar unos cuantos metros hasta el un mirador que permite una experiencia única: sentir en la propia cara la frescura que regalan las cascadas en forma de niebla o una pertinaz, pero inofensiva llovizna.
Una vez superado el temor inicial a lanzarse a las inusitadas y bravías aguas del Rin, aunque sea en barco, el recorrido por la parte baja de la catarata fascina por las fuertes corrientes que hay que salvar.
La ciudad del mismo nombre Schaffhausen, la ciudad que también Vista hacia la ciudad alemana que comparte las cataratas con Suiza.
Lleva el nombre de las cataratas, es una ciudad y comuna suiza con una población de 33700 habitantes, además de ser capital de cantón.
El casco antiguo de la ciudad posee numerosos edificios de la época renacentista decorados con frescos exteriores y esculturas y fuentes orneadas de policromos. Varias casas burguesas de aguilón del siglo XVII fueron conservadas con las torres y los techos fuertemente inclinados cubiertos de tubos en forma de escamas de pescado.
La ciudad ha conservado varios vestigios de su pasado medioevo como varias torres y puertas así como la vieja fortaleza cantonal, el Munot, un terreón circular con unas dimensiones impresionantes. El monasterio de Todos los Santos ha sido restaurado y guarda el museo histórico. La iglesia gótica San Juan data de 1120.
Schaffhausen fue una ciudad Estado en el Medioevo Documentos demuestran la existencia de la moneda de Schaffhausen desde 1045. La abadía benedictina de Todos los Santos fue fundada en 1049 por el conde Eberhard de Nellenburgo quien la dota ricamente.
En 1376 la ciudad se incendió, lo que devastó una gran parte de la misma. Schaffhausen estuvo sumisa bajo la dominación de los Habsburgo, pero gana su independencia en 1415 comprando su libertad al Imperio Austríaco. En 1457 la ciudad se alía con Zúrich. La guerra Suaba, en 1499, acerca la ciudad de los otros cantones, lo que le permitió volverse miembro interino de la confederación en 1501 formando el duodécimo cantón. En 1529 la reforma es adoptada por la ciudad y los conventos son cerrados.
En 1944 la ciudad fue bombardeada por error por la aviación estadounidense creyendo que la ciudad era Alemania, que está unos cuantos grados hacia el norte, al otro lado del Rin que traza la frontera entre ambos países.
Un regalo de la naturaleza en las cataratas
Un lazo multicolor que une a Alemania con Suiza.
Tras una visita a lo largo de ambas orillas del majestuoso río o incluso un recorrido de senderismo por los montes y viñedos no puede dejar de ir a visitar las Cataratas de Schaffhausen que le brindarán un regalo de la naturaleza: un inmenso arco iris que se extiende de orilla a orilla como un lazo colorido y pacífico entre dos pueblos.